Una fresca mañana
del mes de marzo
en el prado del monte
me he recostado,
cara el viento contemplo
por largo rato
el espacio grandioso,
cielo muy alto
de colores tan limpios,
inmaculados,
tachonado de nubes
algodón blanco
que en altura se acercan
sobrevolando,
se retuercen, estiran
y van pasando.
Claro sol resplandece
desde lo alto,
luz y sombras proyecta
sobre los campos,
y en la misma carrera
van circulando,
completando este inmenso
desfile mágico.
Te diré cómo ha de ser
un poema para niños,
lo primero y principal
debe ser entretenido,
para que cuando lo lean
pasen ratos divertidos
y también procurarás
preparar algo cortito,
escribirlo en versos cortos,
pocas sílabas, sencillo,
que muy pronto ellos se cansan
y se quedan aburridos.
El lenguaje que utilices
sea fácil, conocido,
no pongas palabras raras
ni hagas giros retorcidos,
haz que sea musical
con medida, rima y ritmo,
habla de algo evocador
en ambiente sugestivo,
expresando sentimientos
y emociones que vivimos.