Pareados

El maestro me ha mandado
componer un pareado,
yo no sé cómo se hace
pero dice que es muy fácil,
una línea es un verso,
otra línea y está hecho
miraré como terminan
porque debo darlos rima
y las sílabas contamos
con los dedos de las manos,
paso a paso yo camino,
los poemas tienen ritmo,
ahora pruebo en un papel,
que seguro sale bien.

Encalando

En mi pueblo hay muchas tapias
son de adobe color tierra,
les parece viejo y feo,
hay quien dice que da pena,
el alcalde y concejales
han tenido ya una idea,
han traído una máquina,
es redonda y con manguera,
la llenan de cal con agua
y lo lanza con gran fuerza,
pintan todas las paredes
y las dejan como nuevas.
Ahora todo está muy blanco
como novia en la fiesta.
Cuando vienes a mi pueblo
desde lejos y te acercas
más parece Andalucía,
que de Castilla la Vieja

Gorrión

La niña chiquita
camina en la plaza,
un gorrión alegre
cerca se posaba,
y la niña al verlo
a por él se lanza
y corre a cogerlo,
el gorrión la aguarda,
cuando está muy cerca
a volar levanta,
y se posa junto a
la columna ancha,
en base la espera,
rodeándola salta,
la niña le sigue
y la vuelta daban,
de nuevo el gorrión
su vuelo levanta
posándose cerca
para allí esperarla.
Gorrión con la niña
jugaba en la plaza,
volaba contento.
¡Qué bien lo pasaba!

La helada
Un frío cortante
yo siento en mi cara, 
y forma mi aliento 
humareda blanca,
la niebla me oculta 
en esta mañana,
con pasos sonoros 
sobre la hojarasca
recorro un camino 
de hierba escarchada,
las hojas de arbusto
y las finas ramas
están recubiertas 
de espinas muy blancas,
los charcos helados
muy duros no embarran,
conservan a trozos
la última placa 
que quiebra y que cruje 
rompiendo al pisarla, 
parecen cristales
de alguna ventana.
Mirando a lo lejos 
no puedo ver nada,
un gris uniforme
me envuelve y extraña, 
el sol no aparece,
el campo está en calma.